Si la alabanza es una respuesta de todo lo que Dios se ha revelado ser, una pregunta a hacerse es, ¿Qué es lo que mi respuesta dice de quién yo creo que Dios es? ¿Es mi vida de alabanza un reflejo de la maravilla, grandeza, poder, soberanía, transcendencia, todo poderoso, amor y santidad del Creador? O, ¿mi vida de alabanza corresponde a un pequeño, débil y distante Dios que se involucra con algo ni alguien?

Verdaderamente, ¿entiendo yo, quien es Dios?, ¿cómo él se ha revelado en Su Palabra?, o estoy dejando que mis propias limitaciones humanas y debilidades, proyecten la imagen de un Dios que es limitado y débil. ¿Tendría sentido, si nosotros verdaderamente dejáramos que nuestra respuesta se alineara con lo que Dios en verdad es y no con lo que nosotros pensamos? Nuestra respuesta o reacción en la adoración sería inmensa.

La respuesta correcta  a Dios está arraigada en una correcta imagen de El, la cual debe de ser dada por la Palabra. Grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; Y su grandeza es inescrutable.  Generación a generación celebrará tus obras, Y anunciará tus poderosos hechos.  Clemente y misericordioso es Jehová, Lento para la ira, y grande en misericordia.
Bueno es Jehová para con todos, Y sus misericordias sobre todas sus obras. Salmo (145:3-4 y 8-9)

Es bueno tomar un inventario espiritual de vez en cuando. Estas son algunas formas que nosotros podemos responder a Dios en una forma más grande:

Cuando yo veo un amanecer, noto como que pareciera que Dios tomó una brocha inmensa en el cielo con tonos de rojo, anaranjado y púrpura y lo pasó por todo el horizonte. Me hace recordar  de todas las misteriosas y maravillosas cosas que están girando alrededor de este gran universo que El creó y todas hablan de Su gloria. Los cielos cuentan la gloria de Dios, Y el firmamento anuncia la obra de sus manos. (Salmo 19:1)

Mientras camino hacia el auditorio el domingo, aún con mi cabeza girando por el caos de la mañana, yo le pido a Dios que acalle mi corazón y reenfoque mi espíritu. Hay un sentido de anticipación mientras miro hacia adelante y conectarme con Dios durante nuestro tiempo corporal de alabanza y adoración. Abro un pasaje en la Biblia que estamos estudiando, ansioso de como Dios se va a revelar a si mismo a mi en ese día.  Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.
     (Hebreos 4:12)

Cuando tengo una decisión que hacer, confiadamente y completamente oro al Señor para que Su providencia me guíe como él lo a hecho con millones de creyentes por siglos y que se ha probado fiel en las cosas grandes o pequeñas y que El desea completar lo que empezó en mi vida. Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia.  Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.  (Proverbios 3: 5-6)

Es imposible de acabar con todas las formas que nosotros podemos responder a un Dios tan grande y ninguno de nosotros va a responderle a El en una forma grande todo el tiempo. Todos estamos en un proceso y todos somos humanos. El resumen de todo es que , todos somos adoradores mirando a un bebé dormir, apreciando un amanecer o juntándonos con la comunidad en la fe un domingo por la mañana. Cada pensamiento, cada palabra, cada acción y cada reacción está formada de el hecho de, si tenemos a un Dios grande o un Dios pequeño.